Lo que esconde el bosque de Gema Bonnín

Título: Lo que esconde el bosque
Autor: Gema Bonnín
Editorial: Destino juvenil
ISBN: 978-84-08-18205-4
Precio: 14,95€
Sinopsis: En Rodian la magia está prohibida, y aquellos que la practican son perseguidos. Neriabeth Rosaleal es una de esas personas, por eso extrema las precauciones cuando se ve obligada a trasladarse a la capital. Viajará en compañía de Kilian Monteyermo, un noble que tiene una importante misión que cumplir para con el rey. En ese viaje se encontrarán con algo que acabará poniendo en juego las vidas de ambos y el futuro de todo el reino, algo que contiene ecos de un pasado y de una historia que aún no se ha cerrado del todo.

Opinión de Sara: Tengo sentimientos encontrados con Lo que el bosque esconde. Hacía tiempo que quería leer algo de Gema Bonnín tras seguir sus publicaciones y todas las reseñas que había visto por las redes sociales pero me he encontrado algo decepcionada con este libro. Es un libro juvenil que cumple con los requisitos del género pero si dentro de juvenil buscamos su subgénero, la respuesta es romántica. Por la sinopsis y los detalles del libro, se podría pensar que es fantasía pero aunque tiene todos los elementos para ello, no lo es. El libro se centra en la relación entre Neriabeth y Kilian. Una relación imposible, condenada desde el principio… y terriblemente aburrida.
Ha sido bastante predecible la trama, los personajes iban por un camino determinado predecible en todo momento. Lo peor de todo, que la trama de la magia, que tanto me había enganchado al principio, esperando un nudo y desenlaces épicos, se ve diluido y olvidado por el trío amoroso de Neriabeth. Únicamente para ser retomado en las últimas páginas.
Una lectura algo extraña, predecible y a veces monótona.

Neriabeth es una hechicera en un país donde la magia está prohibida. El prólogo nos muestra lo peligrosos que pueden ser los magos y el primer capítulo engancha al lector con la historia de Maoran. Una historia que únicamente se presenta al principio de cada parte del libro. Y muy desaprovechada porque Maoran es un mago ambicioso, quiere vivir para siempre pero junto con su amor verdadero, Prelys. Por tanto, no es movido por un objetivo tan oscuro, haciendo de este villano un personaje perfecto que enseguida despertará la curiosidad del lector.
Pero lamentablemente, Maoran y su trama son relegados ni a un segundo plano. Son casi olvidados por Neriabeth. La trama de ella empieza cuando se queda huérfana y mostrando la verdadera naturaleza de su hermano y su casi prometido. Cuando descubren sus poderes, le dan la espalda por lo que a partir de ese punto, Neriabeth se esconde tras un muro en su corazón.
Por lazos del destino, Kilian, el mujeriego de la corte, ayuda a Neriabeth a ir junto con sus tíos a la capital del reino, mientras busca una posible candidata para ser mujer del rey. Esta parte está bastante bien porque se muestra la química tan evidente que hay entre Neriabeth y Kilian, como se va forjando la relación y surge el amor. Es predecible, porque ya sabemos quién va a ser el tercero que separará a la joven pareja. El rey.
Todo pierde el rumbo cuando ambos personajes llegan a la capital y a partir de ahí la trama se alarga demasiado entre las dudas de Neriabeth si Kilian la ama, si es merecedora de ser amada y si debe casarse con el rey, que si su condición de hechicera, que si esto, que si lo otro. Llega un punto que el libro deja de ser interesante porque la trama principal, la magia y Maoran, se olvidan para convertirse el libro en una imitación del mito artúrico. Un joven rey justo, Lanric, que se desposa con una mujer bella, Neriabeth, que en realidad ella está enamorada del mejor amigo del rey, Kilian.
No, simplemente no. A veces daban ganas de cerrar el libro y olvidarse de todo.
Obviamente, la trama se complica para ir apresuradamente a un desenlace que no dura mucho, un desenlace que permite Neriabeth conseguir lo que más desea pero que la trama de Maoran no tiene un punto y final sino que lamentablemente se queda abierto. En este punto, en el desenlace, es lo que más furiosa me siento porque después de 500 páginas, esperas que se cierren todas las tramas, que haya un final lo suficientemente bueno sobre la trama de la magia y Maoran para luego quedarse todo en nada.
Es precipitado, rápido mientras que la parte del triángulo amoroso ha abarcado demasiado en el libro, ha sido excesivamente largo. Lo que hace que el libro sea muy pesado y monótono ya que Neriabeth da vueltas a lo mismo una y otra vez.

El desenlace ha sido demasiado precipitado y rápido, abierto para una continuación pero no lo suficientemente atrayente para continuar leyéndolo. La trama prometía ser muy distinta a lo que es en realidad, olvidándose de personajes tan buenos y carismáticos para centrarse en una nueva ambientación de la historia de amor trágica del mito artúrico.

Puntuación: 3,5/10