Titulo: La promesa del sucesor (La ley del Milenio 3)
Autor: Trudi Canavan
Editorial: Fantascy
ISBN: 9788401019937
Precio: 20,90€
Sinopsis: Los mundos siguen en guerra; su vida, en peligro.
Han pasado cinco años desde que los rebeldes se enfrentaron al Raen. Cinco años durante los que Qall, el chico que rescató Rielle, ha crecido entre los viajeros, sin recordar nada de su pasado.
Cinco años de caos, que Baluka y los restauradores han tratado de contener. Pero los mundos siguen en guerra, algunos invadidos por máquinas letales, otros gobernados por hechiceros enfermos de poder.
A medida que Qall se acerque a la mayoría de edad, la paz por la que tanto han luchado Rielle y Tyen se verá amenazada y la vida del propio Qall correrá peligro. Porque Dahli está decidido a devolverle a Valhan todo su poder y nada ni nadie podrá detenerle, ¿o sí?
Opinión de Sara: La ley del Milenio empezó fuerte con su primer libro, me atrapó con su sinopsis y el mundo de Tyen pero Rielle nunca terminaba de gustarme. Al igual que sucedió en el segundo libro, que era más lento y sin ese atractivo que poseía al principio. El tercer libro no es el final de la saga aunque lo parezca y quizás hubiera sido mejor que la saga se hubiera terminado ya en La promesa del sucesor.
El principio del libro es lento y difícil porque te dan ganas de dejar la lectura y ponerte con otros libros pero poco a poco, la trama va enganchando al lector. Pero demasiado lento. La trama parece que se ha quedado parada en el mismo punto y no termina de cuajar todas las ideas de Trudi Canavan.
El punto de partida se sitúa cinco años después de que Rielle y Tyen se llevaran a Qall e impidieran que Valhan resucitara. Desde entonces, Tyen ha seguido con su trabajo de espía, viendo como los mundos estallaban en guerra, la magia se iba agotando en otros y nuevas máquinas de guerra surgían a través de sus diseños.
Una vez más, Tyen brilla con luz propia en la historia y sus capítulos son muchísimo más interesantes que los de Rielle. A través de él vemos la duda sobre el renacimiento, su empresa con Vella. Si lo que hace ser como es a una persona son sus recuerdos. La importancia del cuerpo e incluso se araña la posibilidad de traspasar la conciencia, recuerdos y todo lo demás a una estructura mecánica.
Aquí entra en juego la moralidad y la ética. Algo que Tyen cuestionará cada momento de la novela. Por otra parte, sus decisiones lo llevarán a trabajar con los sirvientes de Valhan y al mismo tiempo con Baluka. Ganando más enemigos.
Rielle por otra parte resulta igual de exasperante que siempre. Es un personaje que a la vez ha evolucionado y ha madurado y a la vez no. Los actos de Tyen enseguida los juzga sin conocer todos los detalles. En cierta forma se entiende su postura pero no hay que olvidar sus malas decisiones. Rielle no es quién para decir quién obra mal y bien. Tampoco aparta nada a la trama salvo seguir tomando malas decisiones y poniendo a todos en peligro con su testarudez.
En cierta parte de la novela se descubre que Rielle tendrá muchísima importancia en el siguiente libro por una serie de condiciones y por ser quién es, lo que lleva a plantearse si era realmente necesario. Sinceramente, Rielle es un personaje que nunca me ha gustado, es bastante corta de miras y testaruda.
Este libro es un ejemplo de todo lo que ha estorbado en los esfuerzos de Tyen por impedir la resurrección de Valhan.
Y por último, tenemos a Qall. A diferencia de Rielle, se muestra un proceso lento de maduración y sabiduría pero se puede ver desde el principio ya que en cuanto aparece, es un muchacho egoísta, terco, que no escucha a los demás pero a través de lo que va viviendo con Rielle y Timane, se hace más consciente de la importancia de mantenerse alejado de Dahli y el resto de los secuaces de Valhan. Y al final, como impedir que resucite y salvar a todos. Creo que ha sido el mejor personaje después de Tyen, con una gran entrada y un gran final.
El final podría haber sido perfectamente el cierre de la saga pero Trudi Canavan tiene otros planes. Hay un cuarto libro anunciado y espero que sea el último porque La ley del Milenio ya no tiene mucho que ofrecer tras apartar a los personajes importantes. Rielle no es un personaje que termine de convencer para asumir tanto protagonismo y que todo gire en torno a ella.
Puntuación: 8,5/10
La promesa del sucesor de Trudi Canavan
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